Escuchar las historias de otras personas de cómo han sido abusadas sexualmente, violadas o agredidas sexualmente me hace preguntarme por qué nunca hablé sobre mis experiencias antes. Ver lo difícil que es para algunos de ellas hablar sobre el trauma en su vida y ser capaz de relacionarse con sus historias me hace cuestionarme por qué me tomó tanto tiempo salir y hacerles saber que no están solas.
“Los traumas en nuestra vida de niño realmente pueden impactarnos como adultos y muchas personas no hablan de ello porque no saben cómo o qué reacciones otras personas tendrán a sus historias en la vida.”
Ya sea bueno o malo. Tal vez sea mi educación, mi personaje, o tal vez sea mi signo de horóscopo. Doy gracias a Dios por no dejar que mis malas experiencias me afecten.
La cronista Adriana J. Juárez escribió que tiene 39 años y trabaja para Lideres Campesinas como trabajadora de alcance. Nació y creció en Salinas, Ca. y sus padres nacieron en México.
