Campesinas


nunca pude llamarla mama. Ni en su lecho de muerte.

Mis tristezas



Bajaba las montañas sentada y cruzamos un rio a las 2 de la mañana. Yo sentí que por poco y me arrastra. Había víboras de cascabel. Las escuchamos, pero Dios es grande y nos ayudó a llegar a este país.

Cruzando la frontera “como ave fénix”



Los traumas en nuestra vida de niño realmente pueden impactarnos como adultos y muchas personas no hablan de ello porque no saben cómo o qué reacciones otras personas tendrán a sus historias en la vida.

Mente positiva, vida positiva


Ya conociendo allí en la escuela más madres de familia. por allí me enteraba yo, que alguien ocupaba para que les cuidara sus hijos para irse a trabajar, y yo me ofrecí en ese tiempo. Le digo, -Bueno, yo estoy en casa, mi esposo, mis tres hijos trabajan. Yo les puedo cuidar sus hijos,

Esa es mi historia


Yo lo que quiero es trabajar, porque yo lo necesito. Si trabajo es por necesidad, no es porque yo no necesite trabajar.

Luchando y aprendiendo



Luego yo empecé a hacer otras cosas más fuertes, y ya eso ya era costumbre, lo que yo antes estaba haciendo.

¡Me gusta mucho el deporte!



He pasado momentos difíciles en mi vida, pero junto con mi esposo e hijo los hemos superado porque por encima de todo está el gran amor que existe entre nosotros

Los sueños se cumplen



Vinimos con la esperanza de estar mejor económicamente y entre los dos trabajando tendríamos mejor vida para nuestras dos hijas.

Todo es posible