A dondé pertenezco


Hace unos cuantos años, yo no sabía si identificarme como Chicana o como Latina ni como Americana.  El haber aprendido a leer acerca de la historia detrás de estos identificadores me ayudó a comprender más acerca de Mí.

Historia en progreso


Y mi abuela me acuerdo también que era una persona muy fuerte. Era muy difícil para ella mostrar sus sentimientos porque ella fue una persona que pasó por la revolución. Ella tuvo quince hijos y de los quince todos casi se murieron de hambre y nomás le quedaron cuatro hijos.

Pisca de amor


Oigo las plumas que me rodean en este taller garabateando sus memorias más íntimas. Pienso en lo vulnerables que podemos ser, y al mismo tiempo la motivación en nosotros a través de nuestra palabra escrita. Me siento muy orgullosa de tener un lugar dónde compartir mi historia y reconozco lo único y hermoso que es.

Una amable invitación



Trabajo con la gente, con inmigrantes, con gente que batalla con la pobreza y que no tiene mucha educación, y me pregunto por qué, por qué me importa y algunas veces me pregunto si en realidad importa.

Historia sin título


A la hora de la merienda alguien imprevisto siempre llegaba esperando poder compartir un poco de la deliciosa comida. Algunas veces, algunas de las mujeres que habían contribuido monetariamente a la comida desaprobaban por qué alguien que no había contribuido podía llegar y sentarse a comer. La respuesta de mi abuela siempre era que “un plato de comida no se le niega a nadie”.

La bondad no cuesta nada